El Mantra espacial resonante y la desmaterialización del video digital

 I AM SITTING IN A ROOM

“Estoy sentado en una habitación, diferente de aquella en la que estás ahora. Estoy grabando el sonido de mi voz al hablar y lo voy reproducir de nuevo en la habitación, una y otra vez, hasta que las frecuencias resonantes de la habitación se amplifiquen a sí mismas, de modo que todo rastro de mi habla, exceptuando tal vez del ritmo, sea destruido. Lo que entonces escucharás serán las frecuencias de resonancia naturales de la habitación articuladas por el habla. Considero esta actividad no tanto la demostración de un hecho físico sino, más bien, como un modo de eliminar cualquier irregularidad que mi habla pueda poseer”.

Alvin Lucier (1969)

Un mantra es un instrumento para liberar la mente del flujo constante de pensamientos que la confunden. Usualmente hace referencia una sílaba, una palabra, una frase o texto, que al ser recitado y repetido va llevando a la persona a un estado de profunda concentración (dhāraṇā).

I am sitting in a room de Alvin Lucier compuesta en 1969, consistía en realizar sucesivas grabaciones, superpuestas temporalmente, de la pronunciación de un breve discurso en una habitación especifica con el fin de que a través de ello, se revelara la resonancia natural propia del espacio específico.

Más allá del proceso de disolución del habla, del discurso y de la voz del autor, en la cual, algunos podrían percibir una aniquilación del “yo”, lo interesante es percibir cómo a través de esta especie de mantra pretende revelarse sensorialmente la esencia sonora de un espacio, y cómo Lucier parte en la búsqueda de la esencia sonora de su voz en  un espacio específico. Una brillante expresión del ser resonante en comunión con la esencia resonante del espacio, en un aquí y ahora, ritual y único. Una experiencia interesante para conectarse con el entorno propio y encontrar una clave sonora de uno - por dentro y por fuera -  en un espacio presente específico.

 

Navegando por la red me encontré con esta otra experiencia de Patrick Liddell que parte de la misma noción de las sucesivas grabaciones. En este caso, es de subidas y bajadas de un mismo video de youtube, produciéndose un  incremento del ruido  de la imagen y el sonido, por el ripeo, degradándose de generación en generación  hasta llegar a la subida número 1000.Y más que una búsqueda de algún tipo de esencia, pone de relevancia la calidad de las imágenes  de video que vemos. Según menciona el propio artísta la calidad sonora se pierde bastante  más rapido que la de las imágenes.